El nuevo valor de la tranquilidad

Por Richard Shear* / Copyright © 2010 The Package Unseen

¿Por qué Walmart es tan ruidoso y Nordstrom tan tranquilo? ¿Y por qué, casi sin excepción, los supermercados y los packaging de productos masivos son visualmente tan ruidosos, mientras que las tiendas minoristas de alta calidad son a menudo un ejemplo de calma?. ¿De dónde viene esto?

Dwight Garner escribió una crítica en el New York Times, titulada “Meditaciones sobre el ruido”, en la cual analiza tres libros que tratan las implicaciones culturales del ruido en nuestras vidas. Aquí hay una cita que me hizo reflexionar:

Usted puede juzgar la influencia de una persona -su posición social y política- por la cantidad de ruido que regularmente deba soportar. Aquellos que carecen de silencio en sus vidas tienden a ser los políticamente débiles. Al generar ruido con los que otros deben vivir, mostramos nuestro desprecio por los más débiles.”

Me puse a especular sobre las comparación entre el ruido al que un individuo es sometido en su vida, y el ruido al que está sujeto en su experiencia de compra. No pretendo entender por qué, pero pareciera que las personas que viven en un ambiente ruidoso, son las mismas a la que se somete a experiencias intimidatorias y caóticas de compra. Mientras que las más acaudaladas tienen un acceso fácil a opciones de compra mucho más sobrias.

La identidad de marca y diseño de packaging dentro de estos dos tipos de ambientes de venta, por lo menos hasta hace poco, parecieran consistentes con la idea de que el mercado de masas es ruidoso, mientras que el mercado premium es silencioso. Elija cualquier categoría de productos, desde cereales para el desayuno, papas fritas, cuidado de la piel, barras de chocolate, y el patrón se mantiene consistente.

Pero hay pruebas de que esto está cambiando. He notado la simplificación que está teniendo lugar en los anaqueles y, en una reciente visita al supermercado, pude confirmar que el volumen se está bajando en la mayoría de los pasillos. La imagen de los packs de papas fritas que ilustra esta nota, es un ejemplo de los diversos niveles de decibelios que se pueden ver hoy en día en la mayoría de las categorías.

Tal vez los marketineros están comenzando a darse cuenta de que los consumidores, con estilos de vida cada vez más complejos y ruidosos, están deseando que el tiempo dedicado en las tiendas sea un momento más personal y reflexivo. Un tiempo para tomar decisiones importantes, en silencio, con toda tranquilidad y sin todo ese griterío.

*Agradecemos especialmente a Richard Shear por su artículo. Richard es el Director Creativo de The Shear Partnership.